Por Nacho Eguiarte Para un niño, las actividades que considera propias de adulto como es el caso de la organización, resultan tediosas y aburridas, por eso es necesario hacer que el niño se interese en mantener el orden y la limpieza de sus espacios. Para ello debemos tener la pericia de convertir esas tareas en quehaceres lúdicos, para que el aspecto de juego les haga interesarse cumpliendo un doble cometido, el de la recreación y el orden. Tareas pequeñas. Pedirles que se encierren por una hora en su cuarto a organizarlo, es lo peor que puedes hacer. El tiempo para […]