Nuestro siguiente compromiso, ha de ser, el desechado de las cosas. Queda claro que diciembre y más específicamente la navidad conlleva un grado de consumismo mayor que cualquier otra época del año, sobre todo de cosas que no necesariamente son de primera necesidad, ni que tampoco necesitamos del todo. Es una época en que se ha distorsionado un poco su verdadero cometido, desviándose a los centros comerciales y tiendas de diversa índole.
Bueno con esa vorágine de las compras desatada en esta época, es importante no atiborrar nuestras casas, no importa cuan en oferta esté todo, o que belleza de trato sea pagar a mensualidades sin intereses. Aunque esos son compromisos de otro costal en este compromiso quiero que hagas el esfuerzo, como yo mismo lo hago, de sacar al menos una cosa por cada una adquirida o recibida como regalo.
Vamos poniendo el ejemplo, si compro un suéter, me deshago de un suéter al menos. Si compro un par de zapatos sacó de mi casa uno. Los métodos para desechar los hemos visto anteriormente, dependiendo de las condiciones de las cosas, podemos plantear una venta de cochera, una donación, pasar las cosas a un amigo o familiar o simplemente tirarlas cuando no tienen posible uso. Las opciones tan variadas como son pueden ser combinadas dependiendo de cantidades, condiciones y disponibilidad propia para deshacerse de las cosas.
Las reglas aplicarán también a aquello que recibas como regalo. Trata de desechar un artículo del mismo tipo, es decir si te regalan algo de cocina elimina algo de la cocina, si es algo de vestir que sea una prenda, de más o menos las mismas dimensiones, pues no vale hacer la trampa de que recibes un abrigo y eliminas el calcetín del que ya no encontraste el par.
Yo te recomiendo especialmente si tu casa está ya abarrotada que no te limites al uno por uno, demuestra valor y atrevimiento recibiendo una cosa y botando dos, tres, seis, dependiendo de que tan atiborrado tu espacio esté. Es un buen momento para ser agradecido y además purgar la casa, recuerda que no pueden llegar más bendiciones a unas manos llenas, se tienen que tener vacías las manos para poder recibir. Aplica la regla y logra salir de esta época especial más ligero de cómo entraste en ella.