Los objetos que usamos en la vida diaria se crean para cumplir con un fin, ya sean para rallar verdura, dormir confortablemente, guardar los lápices. Pero sucede que aunque esas cosas tienen una apariencia que todos asociamos con la función que cumple, estas no se limitan a un uso particular cuando pensamos un destino más creativo más para lo que fue creada. Cuando me propongo un nuevo proyecto de organización, me gusta dejar suelta la rienda y dejar que los objetos me hablen diciéndome que requieren como su cuna perfecta para su acomodo así consigo con menos dinero y menos […]