Hoy no quiero hablarles de organización. Al menos no de la organización de las cosas. En esta entrega quiero platicarles acerca de los propósitos en la vida. Por lo regular cuando escuchamos sobre propósito nos vamos irremediablemente a la imagen del año viejo cuando a punto de atragantarnos con las uvas bebiendo a la par un vino espumoso, prometemos a los cuatro puntos cardinales que bajaremos de peso, que estudiaremos inglés, que buscaremos otro trabajo o que dejaremos el cigarrillo. Esas pueden seguir siendo las mismas promesas vanas. El propósito en la vida no es la promesa de una mejoría, […]