Hoy en el ombligo de semana, más que hablar de un tema, lo quiero mostrar. El bricolaje viene a ser una forma divertida y barata de modificar la decoración alrededor de la casa ayudando al reciclaje y forjando habilidades en nuestra persona. Les presento una mesa que conseguimos hacer de una tarima de embarque.
La tarima se lija para eliminar las imperfecciones, mientras más pulido quieras su aspecto más habrá que lijar, en caso de que quieras algo más rústico solo hay que eliminar las astillas grandes.
Con un juego de ruedas para mobiliario las vamos colocando en cada esquina, aquí se optó por unas ruedas de nilón blanco con sistema de embutido para evitar colocara tornillería. Es simple, solo abres un poco la camisa de embutir para sacar la rueda, perforas con el tamaño que pide el proveedor, colocas y fijas la camisa, finalmente introduces la rueda.
Para dar un aspecto más terminado mi eterno cómplice Alfredo pintó la tarima de blanco y colocó un cristal con esquinas redondeadas y los cantos pulidos para aprovechar toda la superficie que en este caso era de 70 x 70 centímetros.
El costo del proyecto fue de 70 pesos por el cristal y 60 por las ruedas, la tarima fue obsequio y la pintura ya la teníamos. En el proceso aproveche para retapizar un love seat que unos amigos queridos nos donaron a la causa de Proyecto Naborita pero decía la Nana Goya, esa es otra historia.