El dinero en ocasiones es problema, ya porque no lo hay o porque se destina para otros proyectos distintos que vacacionar. Aunque las vacaciones en si mismas no son un tema de organización, salvo cuando se trata de planearlas, aun así decidí darte algunos consejos para vacacionar sin dejar tu ciudad de origen. No hay ciudad que no tenga actividades interesantes que realizar todo el año, y aun aquellas ciudades que no son tan dadas a elaborar programas de entretenimiento siempre tienen cosas que ofrecer, entre algunas de ellas están:

Centro Histórico. Denominado muchas veces primer cuadro, en donde por regla general se concentran tanto el comercio como las actividades administrativas y religiosas de la ciudad. Caminar por el simple hecho de gozarlo es una de las actividades turísticas más económicas que pueden existir. Se trata de ir ex profeso al centro para mirar más allá de lo que vemos cuando vamos al centro porque tenemos que realizar trámites o compras. Al dejar de lado la preocupación miramos con otros ojos y descubrimos características que en 10, 15 o 20 años de ir constantemente al primer cuadro de la ciudad jamás habíamos notado; la belleza de un edificio, la forma de cierta plaza, los detalles en uno de los templos, etc. Básico es que arribes con actitud de turista, debes creerte el papel para que rompas con la mentalidad de local al admirar lo que tu propio lugar te ofrece.


© Nacho Eguiarte / NACHOrganiza

Parques, bosques, presas. Las ciudades están asentadas sobre asfalto, pero ese asfalto forma parte de un sistema ecológico violentado en mayor o menor medida; como parte de la misma ciudad se destinaron sitios para servir de pulmones a la ciudad o cuyo destino principal es el fortalecimiento de actividades en contra de los vicios. Un parque, un bosque aledaño, una presa, una unidad deportiva, todas estas son opciones que se pueden utilizar como recurso para una vacación de pocos pesos. Ve con la familia a uno de ellos, preferentemente a uno que no quede dentro de tu radio de vida original, ve un poco más lejos, organiza llevar un itacate, algo para jugar como un tablero o pelotas. La idea es que salgas de la rutina habitual, si se trata de un bosque puedes ir en tono de explorador, como si fueras a la aventura más grande de tu vida.

Museos. No me digas que es aburrido, por regla general cuando turisteamos en otras ciudades es casi irremediable que terminamos yendo a algún museo o centro cultural, pero en casa jamás lo hacemos y lo vemos como si se tratará de un recinto donde de solo entrar mueres de aburrimiento. La cultura no es aburrida, el acercamiento que hacemos cada uno de ella es lo que puede hacerla aburrida, si no abrimos nuestra mente a la exploración y al ansia de conocimiento hasta un programa de Discovery Channel puede resultar tortuoso. Esta vacación puede ser la oportunidad ideal de ir abriendo nuestra mente a cosas nuevas, el cambio siempre será bueno aunque nos provoque un poco de miedo.


© Nacho Eguiarte / NACHOrganiza

 
Concierto, teatro, cine. Este tipo de actividad requiere más dinero, pero si no solemos ir a ninguno de los tres frecuentemente, podemos elegir uno de ellos para ver una obra de teatro, un concierto o una película de arte. Hay mucho teatro local en todos lados que por 50 a 80 pesos te muestran una pieza realizada con poco presupuesto. El cine de arte es por lo general exhibido en salas que cobran pocos pesos. Los conciertos no tienen que ser de Kylie Minogue o The Rolling Stones, no tendrás que gastar tu alma y ojo para ver uno, hay jazz, clásico, rock local, trova, etc. Solo hazte de un periódico o por internet para ver que esta aconteciendo en tu ciudad. Otro tip, muchas de estas actividades incluso están auspiciadas por los gobiernos municipales o estatales y se realizan en plazas públicas o recintos donde no de cobra la admisión. Investiga.
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Centro Comercial. Y si todo lo demás no te apetece, usa la opción favorita del tapatío, vete a placear. Esta actividad tan gustada por los locales en Guadalajara consiste en ir a bobear al más reciente centro comercial, al que queda más lejos de casa, al que tiene los precios más inaccesibles, todo para sentir que rozan esa esfera de poder y de dinero. No compran nada es obvio pues no hay presupuesto pero si recorren todas las tiendas y en más de alguna se prueban una o varias prendas solo para sentir que están de “Shopping” . Se destina gasto solo para el helado de ocasión o la botella de agua pues nunca se debe dejar de lado el “Fitness”. Placear es toda una experiencia para el tapatío y se viste para la ocasión, se trata de mezclarse, de llamar la atención, de ser por un momento lo que el resto del día no se es. Pero créeme cuando el dinero escasea esta actividad puede ser muy lúdica y divertida.


© Nacho Eguiarte / NACHOrganiza

Un consejo para finalizar, cualquiera que sea la actividad que te llame, recuerda es vacación y si cambia toda la perspectiva si te vistes para la ocasión. Viste como turista, actúa como turista, lleva incluso tu cámara fotográfica, todo consiste en adoptar un rol de turista para que la magia se complete.